sábado, 19 de agosto de 2017

Logra La Armonía

Cuando un pianista aprende una nueva pieza musical, no se sienta e instantáneamente la toca a la perfección. A menudo, un pianista debe practicar la labor de cada mano por separado para aprenderse el ritmo, para aprender el sonido. Con una mano practica una parte hasta que la toca con ritmo y facilidad. Luego, el músico practica con la otra mano, tocando las notas, una por una, hasta que se aprende la tarea de esa mano. Cuando cada una de las manos ha aprendido su parte –el sonido, el sentimiento, el ritmo, los tonos entonces pueden tocar juntas ambas manos.
Durante el tiempo de práctica, la música puede no sonar bien. Puede sonar desconectada, no particularmente bella. Pero cuando ambas manos están listas para tocar juntas, se crea la música, se forma una pieza en armonía y belleza.

Cuando empezamos la recuperación puede parecernos que nos pasamos meses, años incluso, practicando conductas individuales, aparentemente desconectadas, en partes separadas de nuestra vida.

Llevamos nuestras nuevas habilidades a nuestro trabajo, a nuestra carrera, y empezamos a aplicarlas lentamente, haciendo más sanas nuestras relaciones de trabajo. Llevamos nuestras destrezas a nuestras relaciones, a veces a una relación a la vez. Batallamos con nuestras nuevas conductas en nuestras relaciones amorosas.

Tocando una parte a la vez, practicamos nuestra nueva música nota por nota.

Trabajamos en nuestra relación con nuestro Poder Superior, en nuestra espiritualidad. Trabajamos en amarnos a nosotros mismos. Trabajamos en creer que nos merecemos lo mejor. Trabajamos sobre nuestras finanzas. En nuestras aficiones. A veces en nuestra apariencia. A veces en nuestra casa.
Trabajamos sobre los sentimientos. Sobre las creencias. Sobre las conductas. Dejamos ir lo viejo, adquiriendo lo nuevo. Trabajamos y trabajamos y trabajamos. Practicamos. Batallamos. Vamos de un extremo al otro, y a veces regresamos y volvemos a empezar.

Hacemos un pequeño progreso, tenemos un retroceso y luego seguimos adelante otra vez.

Todo puede parecer estar desconectado. Puede no sonar como una armoniosa, bella pieza de música, solo notas aisladas. Luego un día, algo ocurre. Estamos listos para tocar con ambas manos, para reunir la música.

En lo que hemos estado trabajando, nota por nota, se convierte en una canción. Esa canción es una vida plena, una vida completa, una vida en armonía.

La música se reunirá en nuestra vida si seguimos practicando por partes.

“Hoy practicare mis conductas de recuperación en partes individuales de mi vida. Confió en que, un día, las cosas se reunirán en una sola, completa canción”.

viernes, 18 de agosto de 2017

Como Alejar la Depresión: Cap. VIII - La Autocompasión Y La Depresión (Parte 7)

La joven que le cortó el capullo a la mariposa

Cuando un gusano se convierte en mariposa, dura horas y horas revoloteando lo más fuerte posible dentro del capullo para romper esas paredes que lo encierran y salir libremente a volar por los campos floridos. Y ese revolotear les Consigue a sus alas las fuerzas que necesita para permitirle después volar debidamente. Y sucedió un día que una muchachita hacer cocido a un capullo y oyó Que la naciente mariposa revoloteaba sin cesar como si estuviera desesperada por salir de allí, y la niña imprudente, movida por una equivocada compasión, tomó una tijera y corto Las paredes del capullo para que la mariposita pudiera empezar Ya a volar sin tener que esforzarse más por salir de allí. ¿Pero qué sucedió? Que por no haberse ejercitado el tiempo debido revoloteando para abrir su capullo, las alas de la mariposa ya no adquirieron la fuerza suficiente y el pobre animalejo no pudo levantar el vuelo y así por querer evitarle un trabajo y un esfuerzo se le privo del placer de lograr Volar por las alturas.

Así nos pasa a nosotros. Solamente si la vida tiene problemas y dificultades adquirimos la fortaleza necesaria. El luchar fortalece. El no tener que hacer ningún esfuerzo entumece y paraliza. Por eso el buen Dios jamás deja pasar un día de nuestra vida sin alguna molestia o alguna contrariedad, o un dolor o un problema. Para que el aleteo, el esfuerzo que hacemos por salir de aquello que nos quiere apabullar, aumenta las fuerzas de nuestra voluntad y nos haga subir mucho más alto en el campo de nuestra personalidad. Por eso él dice en la sagrada Biblia: "al hijo qué más quiero, más lo hago sufrir".
Cuando las penas y Los sufrimientos se miran bajo este aspecto de que nos hacen crecer y traer fortaleza a nuestra voluntad, Entonces ya en vez de producirnos depresión y abatimiento, nos animan a luchar más y más por superarlos y por aumentar Nuestra fuerza de voluntad al aguantarlos. Mientras más tengamos que luchar, más fuerzas adquirimos para subir a las alturas de una gran personalidad.

Además, hay otra noticia Que no puede olvidarse: que la cruz de nuestros sufrimientos no la tenemos que llevar nunca solos. Sí llamamos a Cristo, el tomará la parte más pesada de nuestra Cruz, y nosotros el otro extremo, y así entre los dos será mucho más fácil subir cada día al Calvario de nuestras penas.

Hay que conseguir otro mueble. Un sabio sacerdote alemán cuando una señora le fue a contar que vivía en plena depresión y de tristeza por muchos problemas que se le presentaban le respondió: -"usted tiene que conseguir un nuevo mueble para su casa"-.

"Un mueble más? ¡Sí ya tenemos toda la casa llena de muebles por todas partes!"

"Si, usted tiene que conseguirse un nuevo mueble: un reclinatorio, para que de vez en cuando se adora rodilla y le pida a Dios que la libre de la depresión y que le conceda un buen Genio y la gracia de vivir alegre, y no triste y Renegado. No olvide nunca que la depresión sólo se aleja con las rodillas, y que la verdadera alegría se adquiere también con las rodillas, o sea: rezando, pidiendo a Dios que nos ayude en esto".

Y aquella señora hizo el ensayo. En vez de pensar tanto y con tanta tristeza y rabia en sus problemas se dedicó a pedirle a Dios que le concediera la alegría y que le alejara la depresión, y el efecto fue verdaderamente admirable. Puede ser que a alguno de nosotros nos diga hoy lo mismo una voz desde el cielo: "lo que necesita para alejar de su alma la depresión y conseguirse la alegría y el optimismo es un nuevo mueble, un reclinatorio, una nueva costumbre, dedicarse a pedirle a Dios constantemente que le aleje la tristeza y la depresión y le conceda vivir alegremente los días que aún le quedan en esta vida". "Todo el que pide recibe. Pedid y recibiréis", decía Jesús.

¿Con cuál se quiere cambiar?

Llega un hombre desesperado a la oficina del doctor La Haye y le dice: "mi situación es tan deprimente que yo cambiaría mi suerte por la de cualquier otro hombre, sea quien sea". El psicólogo le responde afablemente: -"Bueno si así lo desea, vamos nosotros a un grupo de oración que tenemos, a pedirle a Dios que le cambie a usted su situación por la de alguno de los otros que han venido aquí a consultarme sus problemas: veamos por cuál quiere que pidamos a Dios que le cambie su suerte: Ayer vino un señor a contarme que esta semana tiene que irse a la cárcel a pagar 7 años de prisión. ¿Quisiera usted cambiar su suerte con la de él?"
"¡Oh no, eso sí que no!"

"Otro vino a contarme que está tuberculoso, que escupe sangre y queso enfermedad le produce una debilidad total y un desgano por todo. ¿Cambiaría usted tu suerte con él?". - ¡No, No, ¡ni pensarlo!"

"Veamos otro caso: un hombre llegó esta semana muy deprimido porque una mala mujer le prendió la enfermedad de la sífilis y el médico teme que es enfermedad se le suba al cerebro y lo enloquezca. ¿Le parece a usted que le pidamos a Dios que le cambie su suerte por la de ese hombre?
-"no doctor-, ¡Cómo se le va a ocurrir semejante cosa!"

" Bueno, veamos otros tres últimos casos: uno ha venido a decirme que tiene una hernia en la columna vertebral y que a la menor fuerza que hace sufre unos dolores agudísimos que no se le calman con ningún analgésico. Otro me contó que está metido en la drogadicción y que se siente totalmente esclavizado por ese vicio y que no se ve ninguna salida a su espantosa mala costumbre. Un tercero llevo aquí muy aterrado por haber tenido una lanza amorosa con la esposa de un policía, el militar aquel lo busca por todas partes para matarlo y me decía que él vive en continúa angustia y con miedo Cada día de que ese sea el último día de su vida... ¿Por Cuál de estos quisiera usted cambiar su suerte?"

El deprimido Suspiro y dijo: "-doctor, por lo que veo, Yo soy de los menos aporreados por la suerte y de los menos desdichados. Yo me consideraba más desventurado que todos los demás, Pero ahora me doy cuenta de que hay otros más infelices que yo. La gente dice: "mal de todos, consuelo de bobos', pues me voy a aplicar a mi vida ese refrán y a tratar de convencerme de que estoy mejor que muchos otros!".


A este señor se le aconsejaron Los Remedios espirituales que estamos dando en este libro y pronto Dejó de ser un "tío quejillas" que de todo se lamentaba, y aprendió a ser un "incorregible optimista" que en su vida vive mirando no lo triste y amargo que le sucede, sino lo alegre y positivo Qué hay en cada día.

jueves, 17 de agosto de 2017

Como Te Quiero Mujer

Te quiero tranquila, deseo que dejes de cargar el mundo sobre tus hombros...

Deseo que dejes de poner a todo mundo encima tuyo, así sean tus padres, tus hijos, tus amigos o tus jefes.

Que dejes de comerte lo que sobra para que no vaya a la basura.

Necesito que entiendas que no podrás cambiar el mundo.

No podrás ayudar a todos los que te necesitan y estar para los que te aman sino empiezas a amarte....

Necesito que te Ames como amas a todos los demás, que te vuelvas tu principal prioridad y que no te trates como opción.

Que dejes de posponer el salón de belleza y  de ofrecerte a tomar la foto para no salir en ella.

Yo te quiero tanto que podría sentarme a escucharte  en un parque, en una banca, ni el café me haría falta.

Yo no te quiero a dieta, ni delgada, ni loca de fitness.

Te quiero sana, te quiero guapa, te quiero así divina pero con las ganas de hacer las paces contigo, con esa mujer que ya se dejó el cabello desatendido y no recuerda cuando fue la última vez que estrenó algo.

Porque pararte frente al espejo a ponerte linda, no te hace menos mamá, menos tía, menos abuela, menos  mujer, menos esposa o profesional.

Porque mientes al decir que nadie te mira, te miras tú!
Tú, tu primer, verdadero y leal amor,
Tú, tu juez más duro,
Tú, tu gran saboteador,
Tú, quien no se perdona,
Tú, la persona más importante en tu vida!!!!!!!!
Yo quiero que te dediques un momento a hacer algo para ti, una lectura, un proyecto, una caminata, una visita que te ayude a ti.

A sacar el dulce y confrontar lo amargo y vas a ver que la palabra PERDON cuando viene de una misma para consigo misma es una gran bendición.

Crece una mujer independiente, sabía, feliz!!!!! 

El mejor y único compromiso es amarse y respetarse a sí misma.

Te quiero así grande, única y feliz

Adrian Gazano

miércoles, 16 de agosto de 2017

Yo Soy Responsable

El cuidado de uno mismo es una actitud hacia nosotros y hacia nuestras vidas que dice: soy responsable de mi persona. 

Tengo la responsabilidad no sólo de vivir mi vida, sino de conducirla. 

Tengo la responsabilidad de atender mi bienestar espiritual, emocional, físico y económico. 

Tengo la responsabilidad de identificar mis necesidades y satisfacerlas. 

Tengo la responsabilidad de solucionar mis problemas o de aprender a vivir con aquellos que no puedo resolver. 

Soy responsable por las elecciones que hago. 

Soy responsable de lo que doy y de lo que recibo. 

También soy responsable de fijar mis metas y de cumplirlas. 

Soy responsable de qué tanto disfruto de la vida, por la cantidad de placer que encuentro en las actividades cotidianas. 

Soy responsable por amar a alguien y por la manera en que expreso ese amor. 

Soy responsable de lo que hago a los demás y por lo que permito que los otros me hagan. 

Soy responsable de mis necesidades y deseos. 

Toda mi persona, todo aspecto de mi ser, es importante. Yo cuento. Yo importo. Se puede confiar en mis sentimientos. 

Mi manera de pensar es apropiada. 

Valoro mis necesidades y deseos. 

No merezco ni toleraré el abuso ni el maltrato constante. 

Tengo derechos, y es mi responsabilidad reclamar esos derechos. 

Las decisiones que tomo y la manera como me conduzco reflejarán mí alta autoestima.

Mis decisiones tomarán en cuenta las responsabilidades que tengo para conmigo mismo.


Melody Beattie de su Libro Ya No Seas Codependiente

martes, 15 de agosto de 2017

Deja Ir Las Viejas Creencias

Esfuérzate más. 

Hazlo mejor. 

Sé perfecto. 

Estos mensajes son jugarretas que la gente nos ha hecho. 

No importa cuán duramente nos esforcemos, pensamos que tenemos que hacerlo mejor.

La perfección siempre nos elude y nos mantiene descontentos con lo bueno que hemos hecho. 

Los mensajes de perfeccionismo son jugarretas porque nunca podemos lograr su meta. 

No podemos sentirnos bien con nosotros mismos o con lo que hemos hecho mientras estos mensajes nos estén manejando. 

Nunca seremos suficientemente buenos hasta que cambiemos los mensajes y nos digamos a nosotros mismos que somos suficientemente buenos ahora. 

Podemos empezar aprobándonos y aceptándonos a nosotros mismos. Somos suficientemente buenos como somos. 

Nuestro mejor ayer fue suficientemente bueno; nuestro mejor hoy es bastante bueno también. 

Podemos ser quienes somos, y hacer las cosas como las hacemos, hoy. 

Esa es la esencia de evitar la perfección. 

Dios mío, ayúdame a dejar ir los mensajes que me llevan a la locura. 

Me daré permiso de ser como soy y dejaré que eso sea suficientemente bueno.

lunes, 14 de agosto de 2017

Como Alejar la Depresión: Cap. VIII - La Autocompasión Y La Depresión (Parte 6)

EL IDEAL: UN ALMA SANA EN UN CUERPO SANO

Los sufrimientos no son exagerados de abrumadores. Si consideramos que las penas que tenemos que sufrir son exageradas, lo recibiremos con Irá y amargura, esto nos puede llevar a la depresión. Nos puede llevar a la depresión. Pero si recordamos la frase de San Pablo pero si recordamos la frase de San Pablo: "fiel es Dios que no permitirá que os lleguen pruebas que superen vuestras fuerzas", ya no nos podremos a pensar que lo que sufrimos es mayor que lo que somos capaces aguantar. Y Esto nos puede animar.

El apóstol Santiago nos da una noticia reconfortante: el sufrimiento tiene la ventaja de quitarse crecer en el alma la virtud de La paciencia. Por eso se dice: "alégrense cuando tengan que pasar por diversas pruebas y sufrimientos, pues las penas pueden producir paciencia. He aquí el consejo de este gran amigo del señor: que cuando nos lleguen sufrimientos no nos dediquemos a desanimarnos creyéndonos abandonados injustamente, sino que más bien nos llenamos de alegría sabiendo que con estas contrariedades estamos consiguiendo una gran cualidad: la paciencia.

Remedio para adquirir fortaleza: fuego y golpes violentos.

Los que saben de metalurgia qué es el acero dar por el fuego y no lo golpean fuertemente, se queda flojo y de poca resistencia. Por eso para que se vuelva fuerte y muy resistente no martirizan poniéndolo a altísimas temperaturas y dándole golpes muy fuertes. Por eso para que se vuelva fuerte y muy resistente lo "martirizan" poniéndolo a altísimas temperaturas y dándole golpes muy fuertes. Algo parecido pasa con nuestra alma: si no nos dejan sufrimientos nos podemos quedar enclenques de voluntad y con muy poca fuerza de carácter, pero si no sobrevienen penas y contrariedades podemos lograr adquirir una gran personalidad. Lo cual es una ganancia muy notable. El pensar en todo esto puede ayudar mucho a alejar la depresión.

Quien más sufre, más Gracias puede recibir

Vino una mujer a quejarse de que su esposo era demasiado áspero y duro en su trato, exclamaba suspirando que en cambio su vecina tenía un esposo todo amable y bondadoso. Le dimos esta respuesta le dimos esta respuesta: "recuerde que la persona que ofrece a Dios más sufrimientos, recibirá de El señor mayores Gracias divinas. Si la otra tiene menos sufrimientos que ofrecer al buen Dios, probablemente tendrá también menos Gracias divinas y menos ayudas que le lleguen del cielo". A la mujer le brillan los ojos de emoción y preguntó: -entonces yo voy a ser más rica para el cielo que la esposa del vecino? -Claro que sí, con tal que le ofrezca sus sufrimientos adiós con la mayor paciencia que le sea posible. Sonrío con la alegría de quien recibe una agradable noticia y al despedirse dijo satisfecha: "me voy entonces a ganarme un gran premio para el cielo aguantándome a este marido tan fiero en la tierra".

Probablemente muchos de nosotros podemos repetir un día aquellas palabras que San Pedro de Alcántara le dijo a Santa Teresa al aparecer salen sueños después de muerto: "dichosos sufrimientos de la Tierra, que me han conseguido tan grandes premios para el cielo". Nada perdemos cuando sufrimos, si sabemos ofrecer todo a Dios. Pero en cambio Si sufrimos renegando nos ganamos 1 antipática depresión y nada vamos a conseguir, para la eternidad. ¡Doble perdida! Señor: señor danos un poquito más de paciencia, para aceptar sin renegar ni deprimirnos, las penas diarias que tú permitas que no sucedan. Y que un día podamos repetir con San Pablo: "no hay comparación entre lo poco que tuvimos que sufrir en la tierra, Con lo mucho que nos gozaremos en el cielo". Por un sufrimiento liviano en esta vida nos aguarda Un peso inmenso de Gloria en la eternidad.

Dimas y Gestas: los dos crucificados

El viernes Santo en el Monte Calvario murieron dos famosos bandidos al lado y lado de Jesucristo. Parece que la conducta de los dos había sido bastante deplorada según se deduce de las palabras de uno de ellos que dijo: "lo que estamos sufriendo nosotros los dos lo tenemos bien merecido Para nuestras malas acciones". El de la izquierda llamado gestos renegó hasta sus últimos momentos y en vez de orar se dedicó a burlarse de Cristo. Pero el de la derecha, llamado Dimas, dispuso aprovechar aquella ocasión maravillosa que se le ofrecía puede borrar sus muchos golpes y conseguirse un puesto en el cielo, ofreciendo al señor sus sufrimientos, Y en vez de maldecir su mala suerte se puso a dialogar con El Redentor crucificado y a proclamar su admiración por él, y hoyo de labios del mismo Jesús estas palabras inmensamente consoladoras: "hoy mismo estarás conmigo en el paraíso".

Analicemos este caso tan curioso: los dos sufren los mismos tormentos y las mismas humillaciones. Uno maldice y reniega y pierde así todos sus sufrimientos. El otro acepta con paciencia sus penas y dolores como pago por sus pecados y los ofrece al hijo de Dios y consigue "robarse" el cielo, Pues esa misma tarde pasa el tormento horroroso de la cruz al gozo eterno del paraíso. ¡Qué negocio tan redondo! Y pensar que ese mismo negocio lo podemos hacer todos y cada uno de nosotros, cada día de nuestra vida: aprovechar las contrariedades y penas que nos vienen y pagar con ellas las deudas que le tenemos a Dios por nuestros pecados y ganarnos con nuestros sufrimientos un puestazo en el paraíso eterno, con tal de que le ofrezcamos a Dios con paciencia lo que él permite que suframos. ¿Lo haremos así?

domingo, 13 de agosto de 2017

La Libertad De La Codependencia

La más emocionante idea que he descubierto en mi sobriedad y en mi recuperación de la codependencia es la magia de fijar metas. Las cosas suceden. Las cosas cambian. Cumplo con proyectos importantes. Cambio. Conozco gente nueva. Me encuentro a mí misma en lugares interesantes. Atravieso los tiempos difíciles con un mínimo de caos. Los problemas se solucionan. Mis deseos y necesidades se ven satisfechos. Los sueños se vuelven realidad.

Estoy extasiada de poder fijar metas, y espero que pueda transmitirles mi entusiasmo. No hay nada en el mundo como ir adonde uno quiere ir, obtener lo que queremos, solucionar un problema o hacer algo que quisimos hacer.

Muchos codependientes no conocen esta alegría. También es nueva para mí. Me pasé muchos años de mi vida sin molestarme siquiera en pensar qué quería y necesitaba, hacia dónde quería ir, y qué quería hacer.

La vida tenía que ser soportable. Yo no pensaba que merecía cosas buenas. No pensaba que la mayoría de las cosas buenas estaban a mi alcance. No estaba tan interesada en mi vida, excepto como un apéndice de otras personas. 

No pensaba en vivir mi vida; estaba demasiado concentrada en los demás. Estaba demasiado ocupada reaccionando, en vez de estar actuando.

No estoy sugiriendo que podamos controlar todos los eventos de nuestra vida. No podemos. En muchas cosas no tenemos la palabra final; Dios sí la tiene. Pero creo que podemos cooperar con bondad. Creo que podemos planear, hacer peticiones, y empezar a poner en movimiento un proceso.

“El deseo, cuando se le guarnece, es poder”, escribe David Schwartz en su libro The Magic of Thinking Big (La magia de pensar en grande). El fracasar al ir en pos de un deseo, de hacer lo que más deseamos hacer, abre el camino a la mediocridad. “El éxito requiere del corazón y del esfuerzo del alma y sólo puedes poner alma y corazón en algo que realmente deseas”.

Melody Beattie de su Libro Ya No seas Codependiente