No me da pena decir que me cuesta manejar mis emociones, sobre todo, la ira.
Me sulfuro fácil y tiendo a equivocarme en mis relaciones con los demás.
Pueden estar seguros de que todos los días lucho por mejorar en esto, y gracias a Dios he avanzado mucho en este aspecto.
Lamento que algunos se crean "santos" y "perfectos" y no acepten que también fallan mucho.
Me preguntan algunos como he logrado mejorar, o que aconsejo para que puedan mejorar.
Les recomiendo estas pautas que los ayudarán a mejorar esos momentos en los que están a punto de perder el control porque tienen las manifestaciones propias de esa situación:
1. Respirar profundo y despacio, aunque suene bien ridículo y obsoleto es una manera muy efectiva de tomar control de la ira.
2. Tomar distancia de la fuente o del estímulo de la ira. Es mejor decir: "me retiro por un momento", que explotar y decir o hacer lo que se les ocurra.
3. El ejercicio aeróbico ayuda mucho. Es importante hacer deporte que ayude a enfocar la ira en una actividad menos riesgosa para todos.
4. Acudir al buen humor para tratar de leer la situación que nos está molestando de otra manera. Muchas veces al vernos mentalmente haciendo el ridículo, todo se distenciona y podemos tener un control de nuestras emociones.
5. Es necesario ser asertivos al comunicarnos. Es Importante hacerles notar a otros de manera franca y asertiva qué nos molesta y qué esperamos realmente. Controlar la ira no significa aceptar el comportamiento equivocado del hermano.
Padre Dios, Tú que eres fuente de paz, ayuda todo aquel que necesite ser dueño de sus emociones.
Amén.
TAREA DEL DÍA:
Controla tus emociones negativas.
Controla tus emociones negativas.
