Criatura, cuando llegue el momento preciso. Cuando llegue el momento preciso.
¿Cuán frecuentemente hemos escuchado esas palabras, de un amigo, de un padrino, de nuestro Poder Superior?
Queremos tanto las cosas, ese empleo, ese cheque, una relación, una propiedad. Queremos que nuestra vida cambie. De modo que esperamos, a veces pacientemente, a veces ansiosamente, preguntándonos todo el tiempo: ¿Cuándo me traerá el futuro lo que anhelo? ¿Estaré feliz entonces?.
Tratamos de predecir, encerrando en un círculo las fechas en el calendario, haciendo preguntas.
Nos olvidamos de que no tenemos las respuestas. Las respuestas vienen de Dios. Si escuchamos atentamente, las oiremos.
Cuando llegue el momento preciso, criatura. Cuando llegue el momento preciso.
¡Sé feliz ahora!
“Hoy me relajaré. Estoy siendo preparado. Puedo dejar ir el momento preciso. Puedo dejar de manipular los resultados. Las cosas buenas ocurren en forma natural cuando llega el momento preciso y sucederán en forma natural”.