Madurar es dejar de estirar la mano para pedir, y comenzar a estirarla para dar...
#reflexionesdelvuelodelamosca
Es difícil dejar de pedir, pero siempre hay mas gratificación cuando no eres egoísta en el arte de dar...
La gratificación no esperes que sea monetaria o con palabras, siempre será cuando la sientes en tu corazon más grande de cualquier valor físico.
La Madera Teresa de Calcuta decía: "Ama hasta que te duela", ella se entregaba en cuerpo y alma a la gente; hacia cada vez más por los demás y nadie le pagaba monetaria mente, ella recibía esa gratificación en su corazón y esa gratificación era la que la mantenía en pie a pesar de las dificultades circunstancias.
Nuestro ser egoísta siempre comienza a centrarse en la frase "dar a cambio de recibir". Difícilmente nos desprendemos de la parte en que no recibiremos recompensa y solo estaremos dando de corazón.